miércoles, 13 de abril de 2011

BARROCO DEl ECUADOR

BARROCO DEL ECUADOR
• Caspicara
Fue un escultor quiteño nacido entre los años 1720y 1725, su verdadero nombre fue Manuel Chilli. El educo en uno de los tantos talleres de escultura que había en esa época, convirtiéndose en uno de los mayores escultores de la época colonial.
El fue el único artista que se dedico a realizar desnudos, a excepción de los Cristos. Entre algunos desnudos que realizo fueron varias representciones de adan y eva. Sus dos más célebres son el de “La Asunción de la Virgen”, de la iglesia de San Francisco; y “El Descendimiento de Cristo”, conocido como “La Sábana Santa”, que se encuentra en La Catedral, ambos en Quito.
• Bernardo de Legarda
Fue un escultor ecuatoriano, fue uno de los mas grandes maestros de la imagineria religiosa barroca latinoamericana. Es autor de retablos policromos y dorados y creo el tipo icónico de la Inmaculada con alas ubicada en la ciudad de quito a mediados del siglo XVIII.
Legarda era el único artista de la colonia que estaba relacionado con los altos círculos sociales, fue secretario del gremio de artistas hacia 1762, y miembro de la exclusiva cofradía de la Virgen del Rosario.
Legarda fue contemporáneo de Fragonard, Boucher y otros maestros europeos del Rococó, cuya huella se percibe en los últimos trabajos .
• Diego robles.
Diego de Robles nació en Toledo, pero desarrolló su carrera en Quito, donde se conserva las obras más notables de su vida artística, impulsada a finales del siglo XVI.
Tuvo una muy grande devoción popular, fue uno de los imagineros más populares de la Colonia y tuvo numerosos discípulos, indígenas y mestizos.
Entre sus obras destacan la imagen de mariana que esta en el Santuario de la Virgen del Cisne, la cual se encuentra en Loja, y que según sus habitantes es una virgen milagrosa.
- Virgen del Cisne
- Virgen del Quinche (imagen mariana)
- Bautismo de Cristo en el presbiterio de San Francisco.

ARQUITECTURA
• Religiosidad y barroco son aspectos indisolubles, la mejor muestra son los templos de Quito: Convento de San Francisco, La portada de la Capilla Mayor.

LA COMPAÑÍA DE JESUS
La Compañía de Jesús, también conocida como La Compañía es una iglesia católica de estilo barroco situada en el centro histórico de la ciudad de Quito, en Ecuador. Es una de las obras más significativas de estilo barroco en la arquitectura Sudamericana. Además fue la sede de la orden jesuita en este país y también albergó en el pasado un colegio. Después de la expulsión jesuita del Ecuador, muchos textos que narraban la historia y ejecución de esta obra arquitectónica se extraviaron.
La construcción de la iglesia con el patrocinio de la Compañía de Jesús inició en el año de 1605 bajo las órdenes del sacerdote Nicolás Durán Mastrilli, y concluyó en 1765. Como resultado la edificación de esta obra arquitectónica duró 160 años.[2] En 1634, el jesuita Gil de Madrigal realizó el crucero pero las obras cobraron impulso con la llegada del hermano Marcos Guerra en 1636, quien era arquitecto y escultor.
La relación en el tratamiento interno entre San Ignacio de Bogotá y Quito se evidencia en el diseño de los estucos, si bien el policromado de Quito y la unidad que le da el tomar la decoración desde los zócalos hasta la clave de las bóvedas señala la potenciación del antiguo esquema bogotano.

IGLESIA DE SAN FRANCISCO (QUITO)
Iglesia de San Francisco es un monumental edificio católico que se yergue en medio del centro histórico de la ciudad de Quito, frente a la plaza del mismo nombre. El imponente edificio ostenta el privilegio de ser el conjunto arquitectónico de mayor dimensión dentro de los centros históricos de toda América y por ello es conocido como "el Escorial del Nuevo Mundo". San Francisco es, además, una verdadera joya de la arquitectura continental por su amalgama de diferentes estilos armoniosamente combinados a lo largo de sus más de 150 años de construcción.
• Construcción
La construcción de la iglesia y convento de San Francisco inició alrededor del año 1550, 16 años después de que los conquistadores europeos fundaran la ciudad española de Quito, y se terminó hacia 1680. Aunque el edificio fue oficialmente inaugurado en el año 1605.
• Estilo arquitectónico
Los planos originales del templo fueron sometidos a diversos cambios a lo largo de los casi 150 años que demoró su construcción. Muchas veces estos cambios fueron "violentos y equivocados" a causa de los daños causados por terremotos y la evolución del arte y la cultura hasta alcanzar finalmente la forma casi ecléctica con la que la conocemos hoy en día; es por ello que San Francisco es uno de los monumentos de mayor importancia dentro de la arquitectura americana.
La fachada del templo refleja la presencia temprana, y por primera vez en América del Sur, de elementos manieristas, lo que lo convirtió en un punto de referencia de este estilo en el continente. La severidad renacentista y el manierismo exteriores contrastan con la decoración interna de la iglesia, en la que se mezclan el mudéjar y el barroco bañados por pan de oro para dar un esplendor inusual,
En sus tres naves, San Francisco devela artesonados moriscos con lazos mudéjares, retablos profusamente decorados y columnas de diversos estilos. En el coro, la decoración mudéjar, original de finales del siglo XVI, se conserva íntegra porque la nave central se vio abajo con un terremoto y fue reemplazado por un artesonado barroco en 1770.
El complejo se completa con el convento, en el que destaca la belleza arquitectónica del claustro principal, dispuesto alrededor del inmenso patio, en dos galerías superpuestas.
• Piezas de arte
En el altar mayor de San Francisco, dominado por un gran retablo barroco y cubierto de pan de oro, destacan las esculturas de la "Virgen de Quito" de Legarda y del "Jesús del Gran Poder" del Padre Carlos; ambos destacados miembros de la escuela quiteña de arte.
La movilidad que tiene la escultura de la Virgen de Quito, cuya modelo habría sido una inquieta niña sobrina del escultor, genera tal atractivo visual que sus réplicas se han convertido en obsequio emblemático del cabildo quiteño a sus huéspedes extranjeros.
El Jesús del Gran Poder es el ícono principal de una de las dos mayores procesiones religiosas de Viernes Santo en Ecuador, que congrega a estratos populares, en un acto de cucuruchos y penitentes, al más puro estilo medieval, que evocan a la española Sevilla.
Las dos naves laterales de la iglesia están llenas de esculturas de santos colocados en retablos cubiertos de pan de oro, ante quienes cientos de fieles se arrodillan todos los días para implorar "intercesiones" milagrosas.[3] San Francisco es, además, una enorme pinacoteca en la que se exhiben docenas de pinturas de famosos pintores quiteños y europeos; pero su principal atractivo radica en las obras pertenecientes a la escuela quiteña de arte, estilo que nació en los patios de este convento, y cuya fama trascendió las fronteras y hoy se encuentra en importantes museos de todo el mundo.

Escuela Quiteña
Escuela quiteña es como se ha llamado al conjunto de manifestaciones artísticas y de artistas que se desarrolló en el territorio de la Real Audiencia de Quito, desde Pasto y Popayán por el norte hasta Piura y Cajamarca por el sur, durante el período colonial (segunda mitad del S. XVI, XVII, XVIII y primer cuarto del S. XIX); es decir durante la dominación española (1542-1824)
También se la considera como una forma de producción artística y fue una de las actividades más importantes desde el punto de vista económico en la Real Audiencia de Quito
Origen.
Se considera que su origen es la escuela de Artes y Oficios, fundada en 1552 por el sacerdote franciscano Jodoco Ricke, quien junto a Fray Pedro Gosseal transforma el colegio San Andrés, en el lugar donde se forman los primeros artistas indígenas.
Como expresión cultural es el resultado de un dilatado proceso de transculturación entre lo aborigen y lo europeo y es una de las manifestaciones más ricas del mestizaje y del sincretismo, en el cual aparentemente la participación del indígena vencido es de menor importancia frente al aporte europeo dominante.[4]
Características
Como fruto del sincretismo cultural y del mestizaje las obras de la Escuela Quiteña se caracterizan por la combinación y adaptación de rasgos europeos e indigenistas y en sus etapas refleja todos los estilos imperantes en cada época en España y así tiene elementos renacentistas y manieristas; durante su apogeo es eminentemente barroca concluyendo con una corta etapa rococó que desemboca en un incipiente neoclasicismo hacia la fase de transición a la etapa republicana.
A más de los aportes españoles, recibe múltiples influencias flamencas, italianas y moriscas, las cuales íntimamente enraizadas en la tradición indo-americana, le dan una particularidad especial, diversa de sus fuentes, pues su resultado es mestizo.
Una de sus características comunes de la Escuela es su técnica de encarnado (como se llama en pintura y escultura a la simulación del color de la carne del cuerpo humano) que da una apariencia más natural a la piel del rostro de las esculturas.
Otra característica es la representación serpenteante del movimiento de los cuerpos, en las esculturas principalmente.
Otra característica propia es la aplicación primero de pan de oro o de plata y luego a una pintura aguada que permite que el brillo metálico dé una apariencia especial.
Las características que denotan su raigambre indígena son:
* Se da una "quiteñización" de los personajes, muchos tienen rasgos mestizos y atuendos locales;
* Aparecen con frecuencia costumbres ancestrales aborígenes;
* Las escenas se ubican en un ambiente propio del paisaje andino, de sus ciudades, de su arquitectura;
* Existe la presencia de fauna local (llamas en lugar de camellos y caballos; cuy en sustitución del Cordero Pascual; monos, zarigüeyas, tapires, felinos, junto con los clásicos borregos de los pastores, etc.), y la flora nativa se descubre en guirnaldas, bordados, incrustaciones, platería, tallas, etc.) al igual que la adopción de plantas vernáculas sustituyendo las de la iconografía tradicional europea; • en escultura y pintura hay presencia de personajes y costumbres propios del medio; • el ejecutor de la obra de arte es el artesano local, de milenaria tradición artística propia; se da una adopción por "naturalización" de los santos europeos, por ejemplo, San Jacinto de Polonia se conoce como San Jacinto de Yaguachi
Principales exponentes
* En escultura : Bernardo de Legarda, Manuel Chili (Caspicara).
* En pintura: Fray Pedro Gosseal , Fray Pedro Bedón, Nicolás Javier Goríbar, Hernando de la Cruz, Miguel de Santiago, Manuel de Samaniego, Vicente Albán.
- Virgen alada pintura de Miguel de Santiago, exponente de la escuela quiteña del siglo XVII.
- Retrato de señora principal quiteña con su negra esclava, por Vicente Albán, siglo XVIII.
- La sábana santa, escultura de Manuel Chili (Caspicara), siglo XVIII.
- Virgen de Quito, la escultura más famosa de la escuela quiteña, obra de Bernardo de Legarda, siglo XVIII.


RETRATO DE SEÑOPRA PRINCIPAL QUITEÑA CON SU NEGRA ESCLAVA, POR VICENTE ALBAN, SIGLO XVIII

 VIRGEN ALADA PINTURA DE MIGUEL DE SANTIAGO, ESPONENTE DE LA ESCUELA QUEITEÑA

















Nuestra señora de belen, pintura anonima del siglo XVII perteneciente a la escuela cuzqueña.



 CRISTO (ESCULTURA)






VIRGEN DE QUITO, LA ESCULTURA MAS FAMOSA DE LA ESCUELA QUITEÑA




IGLESIA DE LA COMPAÑIA(QUITO)

FACHADA
VISTA INTERIOR


IGLESIA DE SAN FRANCISCO
ATRIO

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